La enseñanza de los brujos es así, tómala o déjala. No puedes razonarla. No es posible "verificarla" intelectualmente. Lo único que cabe hacer con ella es ponerla en práctica, explorando las extraordinarias posibilidades de nuestro ser.
Este blog es parte de mi aprendizaje.

jueves, enero 30, 2014

El secreto de la felicidad

Recorres el mundo en busca de una felicidad que está siempre al alcance de tu mano (Horacio). 

Si preguntamos a la gente qué es lo que más desean en esta vida la respuesta más común será: "Quiero ser feliz." 

¿Por qué son felices tan pocas personas?¿Por qué la industria de los antidepresivos es una de las más florecientes?¿No será que buscamos la felicidad en lugares equivocados? 

La felicidad permanente no existe, ya que todo en este mundo es cambiante, lo que sí existe es la felicidad como estado pasajero, se está feliz en unos momentos y en otros no, depende de muchos factores. 

La felicidad no es sólo librarse de la depresión o del dolor, sino más bien consiste en un estado o sensación de alegría, de contento y de maravilloso asombro ante la vida. Pero existen otros momentos en que a causa de problemas es natural sentir tristeza, pena y decepción. 

El verdadero reto está en saber hacer frente a estas fases de nuestra vida en que nos sentimos desgraciados, es decir, conocer y desarrollar las estrategias adecuadas para minimizar los efectos catastróficos del shock y volver cuanto antes a la homeostasis, es decir, al estado de equilibrio que nos proporciona la felicidad. 

Pero ¿cuáles son estas estrategias para ser felices? 

Como todo en esta vida cuesta, la felicidad no va a ser gratuita, y tendremos que trabajar por conseguirla, y mucho, ya que aparte de tener cubierta las necesidades básicas, como comida, bebida y abrigo (cosa sumamente importante), hay que desarrollar una serie de estrategias que conlleva un trabajo diario con nuestro cuerpo, nuestras emociones y nuestra mente. 

Tuve la suerte, o quizás no fuese casualidad, de encontrar un libro que cambió radicalmente la forma de enfocar mi vida, pero no desde el día en que lo leí, sino desde el día en que empecé a poner en práctica sus recomendaciones. 

Como es largo para transcribirlo aquí, haré un extracto lo más completo posible con las diez estrategias para conseguir un estado de felicidad más o menos estable. Al final daré el título y el nombre del autor, así como la editorial para quien quiera leerlo completo, ya que es sumamente agradable al estar contado como una especie de cuento. 

Los diez secretos de la abundante felicidad

1ª Estrategia: EL PODER DE LA ACTITUD 
- La base de mi felicidad comienza con mi actitud ante la vida. 
- Soy todo lo feliz que he deseado ser. De aquí en adelante desearé ser feliz. 
- Si espero lo mejor, con mucha frecuencia ¡lo obtendré! 
- La felicidad es una elección que puedo hacer en cualquier momento y en cualquier lugar. 
- Desde ahora voy a buscar algo positivo en todo y en todos. 
- A partir de ahora encontraré cosas por las que sentirme agradecido. 
- Mis pensamientos son los que me hacen sentirme feliz o desgraciado, no mis circunstancias. Controlo mis pensamientos, por lo tanto, controlo mi felicidad. 

2ª Estrategia: EL PODER DEL CUERPO 
- El movimiento afecta a las emociones. 
- El ejercicio nos libera del estrés y nos hace sentir bien. 
- Una postura adecuada genera una disposición feliz. 
- Los alimentos que tomamos influyen en cómo nos sentimos. 
- La falta de la suficiente luz del día puede generar sentimientos depresivos. 

3ª Estrategia: EL PODER DEL MOMENTO 
- La felicidad sólo se puede encontrar en los momentos. 
- Sólo podremos obtener el máximo provecho de la vida si obtenemos el máximo provecho de cada momento. 
- Vivir en el momento presente disipa los pesares, vence la ansiedad y reduce el estrés. 
- Recuerda que cada nuevo día es un nuevo comienzo, una nueva vida. 

4ª Estrategia: EL PODER DE NUESTRA PROPIA IMAGEN 
- Uno es como él cree que es. 
- Si me siento infeliz conmigo mismo, toda mi vida será desgraciada. 
- Para que mi vida sea feliz, debo estar contento conmigo mismo. 
- Los demás son un espejo nuestro, pero un espejo distorsionado. 
- Para vencer los complejos y las creencias negativas sobre mí mismo y crearme una imagen positiva debo: 
= Averiguar cómo se forjó esa imagen y si es cierta debo cambiar. 
= Hacer cada día afirmaciones positivas. 
= Actuar del modo que me gustaría ser. 

5ª Estrategia: EL PODER DE LAS METAS 
- Las metas dan a nuestra vida un propósito y un significado. 
- Las metas nos dan un motivo para salir de la cama por la mañana. 
- Escribe tus metas a corto, medio y largo plazo y léelas por las mañanas, en algún momento durante el día y por las noches. 

6ª Estrategia: EL PODER DEL HUMOR 
- El humor alivia el estrés y crea sentimientos de felicidad. 
- La risa incrementa el poder de concentración y aumenta nuestra capacidad para resolver problemas. 
- Busca el lado gracioso a toda experiencia, que seguro que lo tiene. 
- No te preocupes por las cosas pequeñas. 
- Recuerda que la mayoría de las cosas... ¡son pequeñas! 

7ª Estrategia: EL PODER DEL PERDÓN 
- El perdón es la llave que abre la puerta de la felicidad. 
- Mientras tengas resentimientos y odio te será imposible ser feliz. 
- Nadie sufre por mi amargura, solo yo. 
- Los errores y fallos son lecciones de la vida. Perdónate a ti mismo y perdona a los demás. 
Recuerda la oración sioux: 
"Oh Gran Espíritu, apártame de juzgar o criticar a otro, mientras no haya caminado en sus mocasines durante dos semanas". 

8ª Estrategia: EL PODER DEL DAR 
- La felicidad no se halla en tener ni en adquirir para nosotros mismos, sino en dar y ayudar a los demás. 
- Cuanta más alegría y felicidad damos, más recibimos. 
- Cada día puedo crear felicidad en mi propia vida, buscando la forma de dar felicidad a los demás. 

9ª Estrategia: EL PODER DE LAS RELACIONES 
- La calidad de mi vida es la calidad de mis relaciones. 
- Todos necesitamos relacionarnos con los demás. 
- Toda alegría compartida se multiplica por dos, sin embargo al compartir un problema éste se reduce a la mitad. 
- Trata a todos aquellos con quien te encuentres como si fuera la última vez que los vas a ver. 

10ª Estrategia: EL PODER DE LA FE 
- La fe es el fundamento de la Abundante Felicidad. 
- Sin fe no hay felicidad duradera. 
- La fe crea confianza, nos da paz mental y libera el alma de las dudas, las preocupaciones, la ansiedad y el miedo. 

"Los diez secretos de la abundante felicidad" Adam J. Jackson. Edit. Sirio S.A. Málaga, México, Buenos Aires.




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sábado, enero 26, 2013

Chamanismo

Conferencia del doctor Manuel Arrieta en el congreso de místicos y chamanes de Barcelona.



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domingo, enero 20, 2013

10 Ladrones de tu energía

Tenemos una carga de energía asignada, Armstrong le llamaba los latidos contados de cada cual; es nuestra responsabilidad utilizarla con medida y no desperdiciarla. Somos conductores de la fuerza Divina, tendremos acceso a ella siempre y cuando estemos conectados conscientemente, eliminando algunas interferencias: 

1- Deja ir a personas que sólo llegan para compartir quejas, problemas, historias desastrosas, miedo y juicio de los demás. Si alguien busca un cubo para echar su basura, procura que no sea en tu mente. 

2- Paga tus cuentas a tiempo. Al mismo tiempo cobra a quién te debe o elige dejarlo ir, si ya es imposible cobrarle. Las deudas no caducan con el tiempo, aunque la ley te proteja; sé responsable, es mejor hacer un plazo de céntimo a céntimo, que perder tu preciada energía y tu palabra. 

3- Cumple tus promesas. Si no has cumplido, pregúntate por qué tienes resistencia. Siempre tienes derecho a cambiar de opinión, a disculparte, a compensar, a renegociar y a ofrecer otra alternativa hacia una promesa no cumplida; aunque no como costumbre. La forma más fácil de evitar el no cumplir con algo que no quieres hacer, es decir NO desde el principio. 

4- Elimina en lo posible y delega aquellas tareas que no prefieres hacer y dedica tu tiempo a hacer las que sí disfrutas. Aunque no debes de huir de responsabilidades y no todo el tiempo es factible, muchas veces por puro control o por no darnos el permiso, seguimos perdiendo tiempo en nimiedades y abandonando lo verdaderamente significante en nuestras vidas. 

5- Date permiso para descansar si estás en un momento que lo necesitas y date permiso para actuar si estás en un momento de oportunidad. La naturaleza, tiene ritmos y tu vida también. No actuar en el momento erróneo te quita energía y no parar cuando lo necesitas, también. 

6- Tira, recoge y organiza, nada te toma más energía que un espacio desordenado y lleno de cosas del pasado que ya no necesitas. Uno por uno, toma cada papel, cada recuerdo y hasta cada sueño y elige. 

7- Da prioridad a tu salud, sin la maquinaria de tu cuerpo trabajando al máximo, no puedes hacer mucho. Toma sol por las tardes, medita, respira, báñate en el mar, haz ejercicio en la naturaleza, escucha tu cuerpo y elimina las toxinas. Haz una cita médica y mira si te faltan minerales o vitaminas. Aliméntate con comidas orgánicas (sin pesticidas) y frescas; trabaja en la prevención para evitar la crisis de una enfermedad (un aviso un cuerpo sin energía). 

8- Enfrenta las situaciones tóxicas que estás tolerando, desde rescatar a un amigo o a un familiar, hasta tolerar acciones negativas de una pareja; y toma la acción necesaria. Resignarte a una situación y sentirte que no tienes control, sólo conseguirá drenarte. 

9- Acepta. No es resignación, pero nada te hace perder más energía que el resistir y pelear contra una situación que no puedes cambiar. Entregar a Dios, siempre puedes elegir tu camino y fluir sin apegos hasta llegar a tu orilla a salvo. 

10-Perdona, deja ir una situación que te esté causando dolor, siempre puedes elegir dejar el dolor del recuerdo. 

Estar conectados a Dios y su amor es la fuente más grande de energía, mientras que los miedos, el rencor y la ira son los bloqueadores más frecuentes. Enfócate en el presente, vivir en el pasado o vivir en el futuro, solo te drenan del presente. 
Recuerda que tienes una fortuna, Dios te regaló una cuenta con latidos de vida, úsalos con conciencia, no los desperdicies y serás feliz, latido por latido. 





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sábado, enero 12, 2013

Carta a los lectores



Queridos lectores: quiero que sepáis que aunque no escriba asiduamente sigo acordándome de vosotros y que siempre que me necesitéis me tenéis aquí. 

Me gustaría que aparte de leer lo que os escribo, tantas veces como queráis, ya que siempre hallaréis algo nuevo en cada lectura, lo llevarais a la práctica. Estos son ejercicios para realizarlos diariamente, sin excepción, se deben convertir en una necesidad fisiológica, como respirar o comer. El desafío es transformar la rutinaria vida cotidiana en un espléndido campo de batalla, y es lograr sustraerse de la vorágine de los pensamientos y de los actos cotidianos mediante la aplicación de estas técnicas. Ya sé que requiere de un esfuerzo descomunal, pero tiene la gratificación de reducir al máximo nuestra importancia personal, liberando toda la energía que usamos para mantener nuestra imagen de nosotros mismos y la idea que tenemos del mundo. El hombre común encuentra en sus rutinas el escudo con el que se protege del maravilloso y aterrador mundo que nos rodea. Mantener la conciencia de la vida se logra al romper nuestras rutinas. Romper las rutinas de la vida es transformar este mundo soso y aburrido en uno maravilloso, misterioso y aterrador. Se debe actuar como el cazador que no sólo debe cazar, sino que él mismo no debe actuar como si fuese una presa. Se debe, por decirlo de algún modo, "andar de puntillas" y "alerta" por el mundo, para sacarle el mayor provecho a la vida.

El común de la gente va de acto en acto sin pensar ni luchar. Por el contrario, un guerrero del conocimiento sabe que no tiene tiempo y, por tanto, no se aferra a nada y realiza cada uno de sus actos como si fuera lo último que hará en la Tierra. El guerrero confía en el poder de sus decisiones, las asume y actúa con el conocimiento pleno de que no tiene tiempo ni espacio para dudas, remordimientos o ambición. A diferencia del guerrero, la mayoría de las personas común creen que tienen todo el tiempo y esa supuesta continuidad los hacen tímidos, porque dudan y se arrepienten o piensan que tendrán tiempo para intentarlo de nuevo o “arreglarlo”. Es por esto que en cada acto que se realice hay que poner toda nuestra capacidad; no llevar en la mente “ganar-perder”; sino poner en práctica todos nuestros conocimientos; evaluar, tomar una decisión y actuar;  "dejarse ir" sin miedo ni ambición.

Buscar la perfección del espíritu es la única y verdadera actividad. Un guerrero es inflexible en esa búsqueda y para ello mantiene una actitud frente a la vida y las cosas de la vida que le permite liberarse del miedo, de la ambición, de la queja y la tristeza. Él sabe que nadie le hace nada a nadie; que uno mismo se hace daño con la gente y con los sentimientos. Por eso de la importancia de la recapitulación y del trabajo diario para romper todas esas rutinas que nos esclavizan. A un guerrero nadie le hace "daño", nadie lo presiona, ni lo mueve, ni lo obliga a hacer cosas que él no quiera. No puede ser una hoja al viento o una lata vacía que la gente anda pateando moviéndola hacia todas partes y a ninguna: Un guerrero, cuando toma una decisión, se deja ir, y cuando ella fluye en sus actos y en su ánimo le da templanza y fortaleza porque está entrenado para sobrevivir, y siempre sobrevive de la mejor forma.

En cuanto a los sueños, puedo deciros también alguna cosilla que os haga cuanto menos reflexionar y darles algún sentido, aunque es el soñante el único que puede interpretar sus sueños, ya que son el reflejo de su propio interior. Nuestra cultura no le da mayor importancia a los sueños, se suele decir, ¡los sueños, sueños son!, pero nada más lejos de la realidad. El psicoanálisis le da una gran importancia a la interpretación de los sueños, de hecho el propio Freud los incluyó en sus terapias y Adler sostenía que los sueños nos ofrecen la solución a todos nuestros problemas, lo único que hay que hacer es interpretar sus señales. Pero esto es muy difícil para la mayoría de las personas, ya que viven en un estado de sueño permanente incluso cuando piensan que están despiertas, por lo tanto, sus sueños son pura fantasía. Sin embargo, el sueño es una puerta de entrada a otros mundos a los cuales vamos periódicamente para renovarnos. Por eso es tan importante para un guerrero el control de sus sueños. En el sueño no eres dueño de ti. Tus visiones son burbujas aisladas, sin conexiones entre sí y sin recuerdo del yo. Por supuesto, la fuerza de la costumbre te llevará casi siempre a soñar que eres tú mismo, pero igual puedes ser un valiente que un cobarde, joven o viejo, hombre o mujer. Para el hombre común, la diferencia entre estar despiertos y dormir es que en el primer estado su atención fluye con continuidad, y en el segundo, en forma desordenada; pero, en ambas experiencias, el grado de participación de la voluntad es mínimo. La persona despierta ahí, donde siempre, se pone su personalidad como una camisa y sale a cumplir con sus tareas de rutina. Y al dormirse se desconecta de nuevo, porque no sabe que puede hacer otra cosa. La vigilia cotidiana no nos deja lugar para detenernos y preguntarnos si este mundo que estamos percibiendo ahora es tan real como parece. Y lo mismo cabe decir del sueño ordinario; mientras dura, lo aceptamos como un hecho indiscutible, nunca nos proponemos recordar dentro del sueño alguna orden o acuerdo pactado en la vigilia. Pero existe otro modo de encauzar la atención, y a su resultado ya no podemos llamarle 'sueño' o 'vigilia', porque parte de un uso deliberado del intento. Lo que ocurre ahí es una toma de conciencia, y da igual que estemos dormidos o despiertos, porque es algo que trasciende ambos estados.

¡Ese es el verdadero despertar: adueñarnos de nuestra atención!. La enseñanza tolteca enfatiza el ensueño. No importa cómo se le describa, su resultado es convertir el caos perceptivo de un sueño común en un espacio práctico, donde podemos actuar inteligentemente. Esta técnica nos permite proponernos objetivos y dar seguimiento a los actos, tal como lo hacemos en el mundo cotidiano. Podemos resolver problemas, curar enfermedades y aprender cosas. Lo que aprendes allí es coherente, funciona. Quizás no puedas explicar cómo te llegó ese conocimiento, pero ya no lo olvidas.
La vida se aprende viviéndola. Lo mismo pasa en el sueño.

Queridos lectores, en varias ocasiones os he mandado ánimos para que no desfallezcáis y sigáis luchando como guerreros. En esta ocasión y dado el cariz que ha tomado la situación con respecto a la postura de la medicina ortodoxa, la cual respeto y he representado, me voy a atrever a hablaros de otro tipo de medicina que aún siendo conocida por mucha gente, es comprendida por muy poca.

 Cuando nos negamos a enfrentar los hechos y nos resguardamos detrás de acciones evasivas, también cuando dejamos asuntos pendientes o contraemos compromisos que nos atan, se produce un estancamiento que genera a su vez una fijación de nuestra atención que bloquea el flujo de la energía. La consecuencia del estancamiento es que la persona deja de ser ella misma. Al estar presionada por la cadena de decisiones que ha tomado durante su vida, ya no puede actuar de manera deliberada y se enreda en las circunstancias. Esta situación puede llegar al punto de la enfermedad mental o física, y sólo se puede solucionar a través de la recapitulación.

Recapitular consiste en hacer una lista de las heridas causadas por nuestras interacciones. El siguiente paso es viajar de regreso al momento cuando tuvieron lugar los hechos para absorber de vuelta lo que nos pertenece y devolver lo ajeno. El guerrero comienza rebobinando su día. Reconstruye las conversaciones, descifra los significados, recuerda las caras y los nombres, busca matices, insinuaciones, disecciona las reacciones emocionales propias y ajenas. No deja nada al azar, agarra los recuerdos del día uno por uno y los limpia a través de la respiración. También escudriña capítulos y categorías completas de su vida. Por ejemplo, las parejas que tuvo, las casas en que vivió, escuelas, lugares de trabajo, amigos y enemigos, peleas y momentos felices. Lo ideal es acometer la tarea por orden cronológico, desde el recuerdo más reciente hasta el más lejano que es posible evocar. Pero, para empezar, es más fácil hacerlo por temas. Una forma muy rentable del ejercicio, accesible a todos nosotros, es la recapitulación fortuita. Si os dais cuenta, constantemente estamos recapitulando. Todos los recuerdos que conforman nuestro diálogo interno pueden ser catalogados como tal. Sin embargo, los evocamos en forma involuntaria. En lugar de observarlos en silencio, los juzgamos, interactuamos con ellos visceralmente. Eso es lastimoso. Un guerrero aprovecha la oportunidad, porque esos recuerdos, aparentemente al azar, son avisos de nuestro lado silencioso.

Para recapitular no hacen falta condiciones especiales. Se puede intentar el ejercicio en cualquier momento y lugar en que uno se sienta animado a hacerlo. Los guerreros recapitulan cuando van por el camino, en el baño, al trabajar o al comer, ¡cuando sea posible! Lo importante es hacerlo. No hay una postura definida. El único requisito es estar cómodos, para que el cuerpo físico no demande atención ni interfiera con los recuerdos. Sin embargo, toman muy en serio el ejercicio. Algunos usan para ese efecto cajas de madera, armarios, o cuevas. Otros se fabrican un asiento en las ramas más altas de los árboles grandes o excavan un hueco en la tierra y lo cubren con ramas, cuestión de gustos, de espacio y de tiempo. Una buena práctica es recapitular sentados en la cama, en la penumbra, antes de acostarnos a dormir. Cualquier medio que nos aísle del entorno sirve para recapitular formalmente. Una vez que hemos localizado un evento y recreado cada una de sus partes, hay que inhalar para recuperar la energía que dejamos atrás y exhalar las fibras que los demás depositaron en nosotros. La respiración es mágica, porque es una función que da la vida. Este tipo de respiración debe estar acompañado de un movimiento lateral de la cabeza al que llaman "ventilar el evento". Es un trabajo energético, no hay un patrón fijo. Lo que vale es el intento. Aspirar cuando se busque recuperar algo y expulsar todo lo que no sea nuestro. Si hacéis eso con la totalidad de vuestra historia, dejaréis de vivir atados a una cadena de recuerdos y os enfocaréis en el presente. Los guerreros describen ese efecto como enfrentarse a los hechos tal como son o ver el tiempo objetivamente.

Una vez que localizamos los recuerdos, éstos  buscan su cauce y la luminosidad se reordena por sí sola a través de la respiración. Vosotros sólo inténtenlo, pónganse disponibles; el espíritu os dirá  cómo hacerlo. La recapitulación parte de adentro, se sostiene a sí misma. Es asunto de acallar la mente y nuestro cuerpo energético toma el control, haciendo lo que para él es un deleite hacer. Te sientes bien, confortado; lejos de darte trabajo, te descansa. Tu cuerpo lo percibe como un inefable baño de energía. Pero debéis tener la actitud correcta. No confundáis el ejercicio con una cuestión psicológica.

Lo importante es empezar, pues la energía que recuperamos desde el primer intento nos dará fuerzas para seguir recapitulando aspectos más y más intrincados de nuestras vidas. Primero, hay que ir por la inversión más fuerte, que son los sentimientos más desgarradores. Después, vamos por aquellas memorias tan profundas que ya creíamos olvidadas, pero que ahí están. Al principio, el recapitular puede darnos algún trabajo, porque nuestra mente no está acostumbrada a la disciplina. Pero, después de cerrar las heridas más dolorosas, la energía se reconoce a sí misma y nos vamos volviendo adictos al ejercicio. De ese momento, cada partícula de luz que recuperemos nos ayuda a ganar más. En el momento en que nos dispongamos a deshilvanar voluntariamente la trama de sus historias personales, estaremos dando un paso decisivo.

La recapitulación no tiene fin, debe durar hasta el final de nuestros días y más allá. Yo estiro mis fibras al rememorar cada noche lo que ocurrió durante el día. Así, mi lista de eventos se  mantiene actualizada. Pero una vez al año me entrego a un ejercicio más completo y total, para lo cual me aparto de todo durante varios meses, me aislo en la playa sin más compañeros que el cielo, la tierra y la naturaleza, ventajas de estar jubilado. Por ser cotidiano, hemos de ver el ejercicio como una rutina, pero no como las que nos impone la sociedad, ésta es voluntaria y controlada por nosotros mismos. Si no recuperamos la totalidad de nuestra energía, nunca llegaremos al poder de nuestras decisiones; siempre habrá un ruido de fondo, un comando foráneo ahí. Y sin el poder de sus decisiones un hombre no es nada. Actualizar los eventos es lo ideal, porque limpia las heridas del pasado y descongestiona los conductos energéticos. De ese modo, rompes la fijeza de la mirada ajena, desenmascaras los patrones de conducta de la gente y ya nada puede volver a engancharte. Te vuelves un ser soberano; tú decides qué quieres hacer de ti mismo.

Parece cosa de magia, brujería o como se le quiera llamar y así es, es magia, pero magia de la buena, sobre todo cuando se hace con pasión, con el amor que llevamos dentro. Ya os han dicho por ahí que el hijo de Dios decía que la fe mueve montañas, pues yo os digo que hagáis estos ejercicios con fe y os puedo asegurar que os sentiréis mucho mejor y os aliviaréis de vuestras dolencias a pesar de lo que pueda decir la medicina oficial.

Os mando mi energía y mi amor para que os ayuden en vuestro Camino.

Un abrazo.

José Cemec





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miércoles, abril 18, 2012

Entrevista a un Chamán

Emilio Fiel es un maestro del chamanismo, comprometido con la formación de grupos dedicados al crecimiento interno, lleva más de 30 años divulgando, publicando y tratando de transmitir las enseñanzas de GAIA y los elementos de la naturaleza.

Pionero del movimiento alternativo de los setenta, fue guía de la Comunidad Arcoiris que, hasta su retirada en la Convergencia Armónica del año 87, estuvo a la cabeza del movimiento comunitario hispano y europeo. Centrado después en la perspectiva chamánica de retorno a la Madre naturaleza, creó los Clanes de Quetzalcótl, que desembocarían en los Grupos GAIA y posteriormente en la Escuela ChrisGaia.

Actualmente está implicado en proyectos como la «Fundación Awen, el Espíritu que fluye», o el « Consejo de jóvenes ancianos» para orientar el trabajo de evolución de la conciencia y de cambio colectivo en nuestro país, mientras prepara también el Proyecto del Triple Anillo dirigido al despertar del Ser Interno (2007), a la Conciencia de la HumaUnidad (2008) y al contacto con el Corazón de Gayah Mah, nuestra Madre Tierra (2009).

-Es usted un explorador del alma humana, ¿qué ha descubierto?

-Que merece la pena vivir el instante presente con alegría; que el amor es posible en cualquier momento, pero que nadie puede llegar a ese punto si no ha abrazado su propia sombra.

-¿Es decir?

-Todo lo que teme, todo lo que rechaza, todo lo que no se atreve a afrontar, todo lo que le provoca reacciones fuertes, todo lo que de alguna forma es exagerado en su vida, todo lo que no soporta en los demás es lo que no ha resuelto en sí mismo. La sombra es la clave de nuestro poder interno.

-¿Cómo la descubres y cómo la vences?

-Lo primero que hay que entender es que hay una forma de cambiar el pasado liberando las energías que nos atan con otros seres con los que hemos mantenido relaciones estrechas: la familia, las ex parejas y los amigos. Cada vez que tengo una relación emocional con alguien y es fuerte y es negativa, intercambiamos emociones y energías.

-¿Y eso nos deja atados?

-Sí, así que si odiamos a nuestra madre nos convertiremos exactamente en ella, viviremos su vida. Eres libre de lo que amas y esclavo de lo que rechazas. En este mundo todo viene en parejas: si quieres el bien tienes que aprender a vivir dignamente el mal; si quieres salud tendrás que abrazar la enfermedad, vivirla con calma y alegría.

-Difícil….

-En ese juego entre la luz y la oscuridad, si estamos en nuestro centro, la ira es sagrada y conduce las energías del espíritu. Pero, si no estamos en nuestro centro la ira, o cualquier emoción puede causar destrozos. No hay emociones positivas o negativas. En tu centro la ira, la tristeza, cualquier emoción es rica y productiva.

-Definamos qué es el centro.

-El lugar de la sobriedad, en el que las emociones no nos dominan. Estamos en un mundo en el que no sólo la cabeza ha causado estragos, también el corazón. Ya basta de tener el alma en el corazón, el alma hay que bajarla a las tripas.

-¿Instinto?

-Sí, tiene que haber una espiritualidad instintiva, sin razón y sin sentimiento, en el sentido de no mover las emociones ni la mente.

-¿Hay que controlar?

-Controlar no significa reprimir, que es lo peor que uno puede hacer; significa llevar nuestra vida desde el interior. Lo importante es entender que los cambios del juego de la vida no deben mover tu realidad, deben mantenerte sereno, sensato.

-Eso quisiéramos todos.

-Cuando dos personas se juntan, la vibración de ambos tiene que unificarse, o tú bajas a que te duela lo que al otro le duele y entonces a los dos os duele, o tú te quedas en tu lugar sereno mientras el otro sube de frecuencia. Tú tienes que mantenerte en tu centro y respetar al otro.

-¿Cómo transformar la oscuridad?

-La vida hay que cambiarla en el instante, cuando surgen las emociones negativas es el momento de recapitularlas. Hay que entender que en nuestros miedos se encuentra nuestro poder. En lo que tenemos oculto en el cuarto de los trastos no sólo está nuestra sombra oscura, lo que más tememos, también está nuestra sombra dorada.

-Preséntemela.

-Es el dios que somos, el poder de los dones internos que están ahí dentro escondidos.

-¿Cómo entras en la sombra?

-Cualquier cosa que rompa la lógica mental hace entrar en las sombras, por eso hay procesos de catarsis muy sofisticados o simplemente directos, como un retiro en la naturaleza cuatro días sin comer ni beber.

-Radical.

-Si no, habrá que esperar a que una enfermedad grave, la muerte de un ser querido o tantas injusticias como hay te saquen la sombra y no tengas más remedio que verla.

-Dígame cómo puedo trabajarla.

-Uno tiene que volver a entrar en el dolor que la oscuridad le causó: si en otro tiempo la locura te rodeó y estuviste a punto de perder el control, tienes que volver, pero con más conocimiento. Si no, no resuelves nada, sólo lo guardas en el cuarto oscuro. Tú ya llevas todo aquello en lo que puedes trabajar dentro de ti.

-Sí, eso dicen todos, ¿pero dónde está?

-¡Jolín! En tu mala gaita, en tus miedos. Cuando entras en tristeza, cólera, depresión, no te vayas a tomar unas copas o al cine, enciérrate con esa rabia, déjala salir, escúchala.

-¿Cómo se expresa la sombra?

-Quien más miedo tiene más sombra tiene, quien más hostil y violento es más la reprime.